Aspirarla seguido
Aspirar la alfombra es la manera más sencilla de mantenerla en óptimas condiciones y evitar que la suciedad se acumule. Además, recuerda que también debes pasar la aspiradora por la parte que está en contacto con el piso cada dos meses.
Alejarla del sol
A diferencia de las alfombras de exterior, las de interior no están preparadas para ser expuestas directamente al sol. El problema mayor es la desaparición de los colores de la superficie, incluso puede llegar a ponerse más delgada en el área expuesta.
Limpiar las manchas lo más pronto posible
Si dejas que pase el tiempo antes de limpiar una mancha en la alfombra, lo más probable es que esta quede permanentemente en ella y retirarla sea más costoso. Apenas notes una mancha, retírala para evitar peores consecuencias.